(Nota: Esta es una historia de ficción; los personajes y situaciones no son reales; lo único real es la parte técnica, que se basa en una mezcla de trabajos realizados, experiencias de otros compañeros e investigaciones llevadas a cabo. Si queréis una versión con la misma dosis técnica pero con menos narrativa, podéis consultar el vídeo de la charla que el autor dio en las XI Jornadas STIC del CCN-CERT aquí).
Otro día más en la oficina, con una lista de tareas pendientes a planificar más larga que la barba de Richard Stallman y ninguna de ellas entretenida: informes, documentación de un par de proyectos y la preparación de una reunión es lo que depara el menú del día para casi toda la semana.
Por suerte, el dicho de que “ningún plan sobrevive al contacto con el enemigo” en este caso juega a nuestro favor. Suena el teléfono, y mi jefe va directo al turrón: “Ha saltado una regla YARA del grupo ATD en la CARMEN de [Redacted] (entidad cuya identidad vamos a dejar en el anonimato denominándola a partir de ahora “la Organización”). Coge tus cosas y ve para allí a la carrera”.
El subidón ante la emoción de la caza es instantáneo: ATD es nuestra denominación interna de un grupo de atacantes que cazamos hace unos meses en otro cliente, y nuestros reverser destriparon el malware de arriba a abajo sin piedad. El análisis permitió detectar una serie de “irregularidades” particulares en su forma de actuar, lo que nos permitió generar una serie de reglas de YARA de alta fidelidad (es decir, falsos positivos prácticamente nulos). Si ha saltado en CARMEN (nuestra herramienta de detección avanzada de intrusos), es que tenemos “trufa” al 99%. [Read more…]